En esta actual modalidad de entrevistas que son los vivos a través de Instagram, podemos encontrar, participar e interactuar, de interesantes conversaciones de todo tipo. Un ex Estudiantes, el director técnico Cristian Bove, ha iniciado por esa vía una serie de encuentros con sus colegas, para intercambiar experiencias, formas de trabajo y que la gente conozca más en profundidad el pensamiento de los entrenadores.
Uno de los participantes ha sido Marcelo Vázquez, quien en una extensa charla y ante cada requerimiento de su colega (actual técnico de Peñarol de San Juan) dejó estos conceptos sobre el momento actual, la realidad de Estudiantes, sus jugadores, la profesión y el fútbol en general.
La cuarentena y el aislamiento preventivo
Estamos en una situación en la que no le gusta estar a nadie. Tenemos que seguir los pasos que anuncia el presidente Alberto Fernández. Nosotros vivimos de un deporte y se hace difícil esta situación. Por ahí los que estamos lejos de la familia también, más allá de la contención que podamos tener de donde estamos trabajando. Es complicado. Tenemos picos de estar bien, tranquilos, y por ahí estamos medio bajón. Cada uno con su historia. Hoy estamos cómo tenemos que estar, seguir cuidándonos. Es un riesgo estar por la calle. Cuidarnos y cuidar a la gente que nos rodea.
La situación del plantel celeste
Tomamos la decisión de quedarnos en Río Cuarto. Tuvimos una reunión con el presidente Alicio Dagatti y el grupo de jugadores, pensando que esto podía ser por menos tiempo. Nunca nos imaginamos que iba a ser tanto. Cuando se dictó la cuarentena obligatoria estábamos todos acá. Estamos siguiéndonos a menudo con ellos. Tenemos una comunicación muy fluida.
Hay un grupo de jugadores en el complejo con el profe Ricardo Palladino. Están entrenando en grupitos de a dos, con las medidas sanitarias que corresponden, el profe los tiene controlados. Más allá de lo que puedan hacer físicamente están contenidos. Después el resto está dividido. Cada situación es totalmente distinta, compleja. Tenemos chicos que están en departamentos con su familia y les queda muy chiquito el espacio para trabajar. Así todos. Hay que acomodarse a lo que tenemos y seguir con paciencia. Armarnos de paciencia es el lema que tenemos que seguir todos.
Estudiantes como club
Es un club muy familiar, con mucha gente que colabora permanentemente. Ya me siento uno más en la institución y soy un agradecido con toda la gente que trabaja acá. Es una familia, un club muy cálido. A nivel institucional el club está muy bien y ha crecido mucho.
El futuro del Chupa y la ilusión de todos
La carrera de Adrián Peralta siempre ha ido en levantada, ha crecido muchísimo y está capacitado para jugar un torneo superior, no tengo ninguna duda. Le tiene que llegar la oportunidad.
Hoy en el plantel hay muchos chicos que se han potenciado mucho, están en una situación que pueden ir más allá. Ojalá sea en esta institución y lo podamos dar todos juntos. Es lo que uno sueña. Poder ascender a Estudiantes a la Superliga. Sería tocar el cielo con las manos y que mejor que disfrutarlo con este grupo.
La llegada de Néstor Ortigoza
Fue un salto de calidad. Por lo que representa él, su historia en el fútbol, por todo lo que ha logrado, y más como persona. Es muy humilde. Más allá de todo vino a ponerse a la par del grupo, a ser un jugador más de Estudiantes. Por el grupo que tenemos quien viene de afuera se acopla muy bien, y lo de Néstor fue así. Tener a Ortigoza es muy importante para todos, y sentimos que fue una muy buena contratación, en un momento justo, donde estamos peleando algo importante.
Marcelo Vázquez dixit
Lo lindo que te deja el fútbol son las amistades. Son leales. Soy feliz cuando me reencuentro con un jugador que he dirigido y viene y me saluda con un abrazo.
Verlo a Maxi Comba en Superliga nos emociona. Cuando va a disputar una pelota sentimos que vamos todos con él.
Estamos todos esperanzados de que pueda continuar el torneo y de seguir peleando.
El fútbol actual se juega con mucha intensidad, y esa intensidad te lleva a meter mucho, a correr mucho y a jugar cuando tenés la pelota.
El equipo más difícil fue Atlanta. Podría decir que fue San Martín, que nos ganó acá y nos sacó el invicto. Pero por juego y funcionamiento, más allá de los resultados, fue Atlanta.